Un agujero negro de información

Buena parte de la información generada en esta era será inaccesible para generaciones futuras por el deterioro de los datos, la obsolescencia tecnológica o las leyes del copyright

En las pocas décadas que la humanidad lleva inmersa en la era digital ha creado datos como para llenar la memoria de tantos iPad que, apilados, casi llegarían a la Luna. El ritmo de creación de información es tal que, según un estudio de la corporación EMC y la consultora IDC, se dobla cada dos años. Para antes de que acabe la década, habrá 44 zettabytes de datos (un ZB es igual a un billón de gigabytes) y el montón de tablets habrá ido y vuelto al satélite más de tres veces.

Lo paradójico es que buena parte de esa información se perderá para las generaciones futuras. El vicepresidente de Google y uno de los padres de internet, Vinton Cerf, alertaba en una conferencia de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia del peligro de que lo creado por esta generación no deje apenas rastro.

En la creencia de su eternidad, el homo digitalis ya no imprime fotos, las guarda en formato digital, no escribe cartas, sino que envía email, no almacena discos, sube las canciones a la nube. Una creciente parte de su vida se desarrolla en la red: juega en línea, publica selfies en Facebook y comparte sus pasiones en tuits. Pero lo digital no es tan eterno.

El deterioro de los soportes donde se almacena la información, la desaparición de los programas para interpretarla o las limitaciones impuestas por el copyright harán que, para los humanos del futuro, sea inaccesible. De hecho, ni siquiera habrá que esperar a que los arqueólogos del futuro descubran que, como decía Cerf al Financial Times, los comienzos del siglo XXI son "un agujero negro de información". Los primeros efectos de lo que los anglosajones llaman era digital oscura ya se están notando.
El caso de los disquetes ejemplifica el problema planteado por el vicepresidente de Google en toda su complejidad. Fueron el sistema de almacenamiento básico en los años 80. En ellos cabían tanto las fotos familiares como el trabajo hecho para la clase o los documentos del trabajo. La mayor parte de toda esa información ya se ha perdido. Y si aún queda algún disquete, es cuando empiezan de verdad los problemas: habrá que encontrar una disquetera que lo lea, rezar para que los datos no se hayan corrompido por el paso del tiempo y para que el programa que los abre siga existiendo.

En 1997, cuando la actual era digital apenas comenzaba, cuando los ordenadores personales solo estaban al alcance de los más pudientes e internet era para una casta, cuando aún no existía Google y mucho menos Facebook o Twitter, y Microsoft dominaba el mundo con su Windows 95, Kuny, entonces el asesor de la Biblioteca Nacional de Canadá dio una conferencia para la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecas. Su título era premonitorio: ¿Una era digital oscura? Retos para la conservación de la información electrónica. La visión de Kuny, como la actual de Cerf, está más vigente que nunca.

Información de nuestro tiempo inaccesible

"No creo que exista un riesgo de que la información de nuestro tiempo vaya a quedar inaccesible, creo que es una certeza. Ya está pasando, cada día, en todo tipo de organización, para todas las clases de datos", afirmaba Kuny. De hecho, creía que todo lo relacionado con la conservación digital iría a peor. "Hay mucha más información nacida digital que antes y apenas hay unas pocas instituciones públicas o privadas que estén activamente implicadas en lidiar  con este problema”."> Sabemos que existen muchos riesgos, pero también hay luces contra la edad digital oscura. Luces que están encendiendo las soluciones tecnológicas, organizativas y legislativas al respecto, para que desaparezca este posible agujero negro en la comunicación.


Rómpete la cabeza y crea valor añadido

Con la crisis, y sin ella, nuestros clientes cada vez son más exigentes y buscan dar "algo más" a sus productos para diferenciarse de la competencia y conseguir así ser la decisión de compra del consumidor final.

El desarrollo del mundo digital y el exceso de oferta han globalizado el mercado y han convertido a los consumidores en expertos compradores y comparadores. Disponen de toda la información y de las opiniones que necesiten de cualquier lugar y en tiempo real.
Esto ha derivado en que las marcas se hayan tenido que poner las pilas para sobrevivir, porque ya no vale “mis clientes están acostumbrados a comprarme”. Ahora, si quieres que alguien adquiera tu producto debes ser de verdad el que mejor cubra sus necesidades.¿Qué hago para conseguirlo? ¡diferénciate!
No estamos hablando de ponerle a tu producto unos luminosos fluorescentes ni nada estrambótico que al final resulte inútil y además encarezca su precio, sino de dotar de valor añadido al objeto.
Según nos resume Bernd Schmitt en su libro Marketing Vivencial, las claves para la diferenciación de las marcas con su competencia son:
  • Toma conciencia sobre la evolución de las experiencias Las estrategias de marketing y publicidad de las marcas deben, no sólo planificarse, sino elaborarse pensando en primer lugar en los clientes
  • Los detalles sí importan, aumentan la calidad del servicio, la fidelización y por tanto la reputación
  • Toda empresa debe tener un elemento que le diferencie
  • Debemos analizar en términos de mercado. Las marcas deben incluir el estudio del consumo en sus estrategias de marketing y publicidad.
  • Quienes focalizan únicamente en la puesta en marcha de un producto sin atender a la evolución del consumo, están dejando fuera variables de gran relevancia que condicionarán también las decisiones de los usuarios
  • El dinamismo y la esencia dionisíaca –asociada a los placeres- eliminarán la burocracia, dando lugar a la creatividad, la emoción y la bienvenida al cambio
Tienes que romperte la cabeza, ser creativo, espiar otros sectores, aprender… para conseguir dar con la tecla y ser el mejor.
Esto es lo que hizo a AGA Ediciones con el lanzamiento de la colección de libros infantiles Olili y sus aventuras.
Tenían un gran producto, historias infantiles sacadas del diario de la infancia de Olivia F. Cabellos, su escritora. Estudiaron el mercado y la demanda de este sector y vieron una necesidad, carencia u oportunidad (como lo queráis llamar):no había libros para niños escritos al mismo tiempo en inglés y español, así que tradujeron los textos para que los más pequeños pudieran leerlos en ambos idiomas simultáneamente. Después les pusieron cara a los protagonistas con unas encantadoras ilustraciones de Ana de Puntillas y por último, lo más innovador, les dieron vida con la técnica de realidad aumentada.
La editorial, en lugar de esquivar las nuevas tecnologías y enfrentarlas como “la competencia que me está haciendo perder negocio”, se unió a ella y dotó de valor añadido a su producto para conseguir una ventaja competitiva en el mercado.
Paso a paso fueron creando un producto centrado en las necesidades de los clientes y como resultado han obtenido libros que los niños piden a gritos a sus padres porque pueden utilizarlos con tablets y smartphones;y que al mismo tiempo los colegios y los padres demandan para fomentar el inglés en la educación de sus alumnos e hijos.
LA CONVIVENCIA DEL PAPEL Y LOS DISPOSITIVOS DIGITALES ELEVADA A LA MÁXIMA POTENCIA, ESTO ES LA REALIDAD AUMENTADA
La realidad aumentada es la forma en la que definimos una visión de la realidad en la que se agregan elementos virtuales.

Para ello necesitamos un dispositivo capaz de leer imágenes (Tablet o Smartphone) y un software, normalmente una app. Una vez que tenemos instalada la aplicación, nuestro dispositivo leerá el código o el objeto real que tiene delante y nos mostrará a través de la pantalla la información o animación virtual.

Nos permite conocer información adicional sobre la pieza de un museo o ver cómo se divierte en la noria el personaje de nuestro libro.

Las posibilidades a nivel educativo son infinitas y muy pronto todos estaremos muy familiarizados con este nuevo tipo de realidad.


neobis presenta su plataforma digital en C!Print

Durante esta segunda convocatoria del salón, neobis presentará la red social profesional de la Comunicación Gráfica y la nueva imagen de marca de la Asociación

neobis, Asociación de la Comunicación Gráfica, participará en la segunda edición de C!Print, que tendrá lugar los días 6, 7 y 8 de octubre de 2015 en el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo de Madrid.

Durante esta segunda convocatoria del salón, neobis presentará la nueva imagen de marca de la Asociación además de la red profesional de la comunicación gráfica, pionera en el mundo asociativo empresarial del sector.

Los asistentes podrán descubrir de primera mano la plataforma digital de neobis, una plataforma personalizada para el sector en la que impera la filosofía del networking y la participación. Ofrece un buscador de empresas, diferentes modelos de mensajería instantánea, foros, encuestas, información, servicios online, blogs, tablón de anuncios y canales de suministradores entre otras herramientas.

AGM se transforma en neobis

Esta red profesional se desarrolla siguiendo las nuevas necesidades de las empresas de la comunicación gráfica y pretende aunar fuerzas para fomentar la permanencia en activo de las mismas. Simultáneamente, responde al cambio en la estrategia y en la imagen de la Asociación aprobado el pasado 15 de julio por la Asamblea General  de AGM.