Una radiografía del sector

Una radiografía del sector

Mucho se ha escrito y mucho se seguirá escribiendo acerca del futuro  del sector gráfico. Lo cierto, como ocurre siempre,  es que el sector tiene futuro, pero seguramente es otro  diferente del que algunos esperan y para otro tipo de empresas.

  • En España había a finales del 2014, 6.607 empresas activas en el CNAE 181 (artes gráficas) y 738 en el CNAE 172 (manipulados)
  • Tendencia hacia la concentración y a la formación de oligopolios en todos los subsectores
  • Desde diciembre de 2013 el sector no pierde empleo: al finalizar el pasado año contábamos con 67.803 personas afiliadas a la seguridad social
Autor: Jesús Alarcón, Secretario General AGM
Mucho se ha escrito y mucho se seguirá escribiendo acerca del futuro  del sector gráfico. Lo cierto, como ocurre siempre,  es que el sector tiene futuro, pero seguramente es otro  diferente del que algunos esperan y para otro tipo de empresas.

En verdad, nadie conoce el futuro. Se pueden proyectar tendencias, compartir reflexiones o hacer gala de una poderosa intuición, pero poco más. Ahora, para hacer todo esto, es indispensable conocer el presente.

En AGM llevamos casi una década invirtiendo en datos fiables, no siempre tan actualizados como quisiéramos por que el sistema de digitalización del Registro Mercantil no posibilita mayor anticipación, pero sí contamos conuna valiosa información que nos permite asesorar a las empresas sobre las tendencias del sector  y realizarles, de forma anónima, análisis comparativos con su  competencia directa.

Lo cierto, según datos del Registro Mercantil, es que en España había a finales del 2014, 6.607 empresas activas en el CNAE 181 (artes gráficas) y 738 en el CNAE 172(manipulados). Empresas activas quiere decir que no están en liquidación, concurso de acreedores o afectadas por cualquier otro procedimiento similar.  Estamos hablando de una reducción aproximada del 50 por ciento sobre las cifras que se manejaban hace apenas una década.

Hace años que en Estados Unidos se venía observando una tendencia hacia la concentración y a la formación de oligopolios en todos los subsectores. Al fin y al cabo, fueron ellos quienes acuñaron el concepto de sobrecapacidad crónica, incluso antes de imaginar que aparecería el fenómeno de las redes sociales, que vendría a reducir aún más la demanda del sector. Y, en España, también seguimos idéntico camino.

grafico 1 facturación del sector en España

grafico 2 facturación del sector del manipulado en España

  • Empleo del sector gráfico

Trabajan en el sector gráfico casi 40.000 personas menos que antes de comenzar la crisis. Al finalizar el pasado año contábamos con 67.803 personas afiliadas a la seguridad social. La destrucción de empleo se ha distribuido geográficamente de la forma habitual: un tercio en Madrid, otro en Cataluña y el otro por el resto de España.

La buena noticia es que la caída se ha frenado, como lo demuestra el hecho de que desde diciembre de 2013 el sector no pierde empleo. Eso sí, está plano, porque hasta el pasado febrero tampoco lo había creado. Y la estimación es que tardaremos todavía un poco en crear nuevos puestos de trabajo porque las empresas tienen margen de crecimiento con las plantillas actuales.

  • Estado financiero del sector gráfico

En el orden financiero, la rentabilidad económica,  los resultados y el endeudamiento de las empresas nos permiten observar la brecha existente en el sector. El 54 por ciento de las empresas declaran rentabilidad y resultados  positivos y acumulan el 68 por ciento de los ingresos del sector. En el otro extremo se sitúan 1.826 empresas, el 27.64 por ciento, que, además de obtener resultados negativos, tienen un ratio de endeudamiento superior al 75 por ciento. Estas últimas tienen muy comprometida su continuidad, si bien es cierto que representan el 13,9 por ciento de los ingresos del sector.

  • Análisis por subsectores

Por subsectores, constatamos que la impresión comercial es el segmento menos concentrado aunque la disminución del número de empresas, que no de la facturación, está asegurada. Por su parte, el sector de la fabricación de etiquetas es el que mejores ratios obtiene: Su endeudamiento medio es veinte puntos inferior a la media de todo el sector, sus resultados después de impuestos alcanza el 5,1 por ciento de los ingresos y su porcentaje de fondos propios son los más elevados de todos los subsectores analizados.

Mención especial merece el sector de la impresión de libros. Primero de todo hay que desmitificar por el momento el impacto del libro editado en otros soportes diferentes al papel. En el gráfico adjunto se puede observar cómo el número de títulos en otros soportes ha comenzado a descender. Debemos entender que el libro es un producto gráfico muy vinculado al consumo y que su demanda crecerá a medida que se recupere la economía. Lo que también es cierto es que este subsector podría necesitar una mayor concentración; El tamaño de sus clientes, los resultados negativos del colectivo y su exceso de capacidad productiva así lo podrían aconsejar.

grafico 3 evolución de la edición de libros

Con independencia del análisis económico, hay varias cuestiones que no debemos obviar:

La primera es que el sector está perdiendo sus límites. Hay trabajos que ya no son privativos de las empresas de nuestro sector. Las agencias, los proveedores de servicios informáticos, editoriales o de marketing y los trabajadores freelance, interactúan con frecuencia en el mercado de la comunicación gráfica.

La segunda es que todo puede ser impreso y personalizado con independencia del soporte, lo que aumenta considerablemente los metros cuadrados de superficie susceptible de ser impresa.

Y es que, la oportunidad está como siempre en la comunicación. Las necesidades creadas artificialmente suelen corresponder a modas temporales y pasajeras, pero la comunicación es consustancial a nuestra propia existencia. El ser humano siempre va a necesitar comunicarse, solo que no siempre lo hace de la misma forma ni con los mismos medios (destacar con una gota). Basta con echar una mirada a la historia y observar cómo la comunicación ha estado en constante evolución. Ahora nos corresponde a nosotros decidir si evolucionamos hacia otros productos de comunicación o si nos mantenemos en los tradicionales. Al menos por el momento, ambos son necesarios.