Salario Emocional ¿qué es y que efectos produce en las empresas?

Los cambios sociales que hemos vivido a lo largo de estos años de crisis no sólo han modificado la manera de entender y de realizar los negocios, sino que también han cambiado a gran parte de la población: sus inquietudes, sus necesidades, las cosas que valoran etc. Además, se ha incorporado una nueva generación al mercado laboral, los millennials cuyos intereses y forma de trabajar son el máximo exponente de esta nueva realidad. Con ellos surge este nuevo concepto, el salario emocional.

Todo esta ha generado nuevos conceptos, nuevas ideas que de deben tener en cuenta. En resumen, no podemos dejar de lado la nueva realidad del mundo en el que vivimos y las empresas no pueden vivir al margen de todo esto.

El concepto salario ha cambiado, ya no es sólo una cantidad de dinero reflejada en una nómina. Ya se lleva tiempo hablando del salario emocional, concepto que refleja muy bien la importancia de que la retribución no sólo implique prestaciones económicas o tangibles económicamente hablando, sino que cada vez más los trabajadores valoran conceptos intangibles pero que se vuelven imprescindibles a la hora de valorar si un puesto de trabajo “es para ellos”:

  • Horarios de la empresa. Los trabajadores cada vez valoran menos la posibilidad de realizar horas extraordinarias a lo largo del año aunque supongan una manera de ampliar su salario
  • En consonancia con lo anterior, políticas de conciliación de la vida personal y laboral. Es decir, la posibilidad de realizar una jornada completa, con un salario total y sin perder la capacidad de conciliación
  • Aplicación de las nuevas tecnologías y, en los puestos de trabajo que lo permitan, la posibilidad del teletrabajo
  • Un plan de carrera real y efectivo y una formación continuada
  • Un buen ambiente de trabajo, basado en el respeto y en la profesionalidad

¿Cómo implantar el salario emocional en mi empresa?

Grandes compañías de todo el mundo están incluyendo paquetes de medidas que contemplan convertir estas empresas en baluartes del pago del salario emocional. No lo están haciendo únicamente de manera altruista, sino que les está proporcionando dos importantes ventajas. Por un lado, el salario emocional se está convirtiendo en un baluarte de la política de Responsabilidad Corporativa de estas empresas, lo que les genera una gran imagen pública que les ayuda (y mucho) a la hora de promocionar en el mercado sus productos o servicios. Por otro, en casi todos los casos, las empresas que aplican en su política de dirección de personas todos esos principios son ejemplos de éxito empresarial, por lo que el salario emocional está directamente relacionado con la mayor implicación y la mayor productividad de los trabajadores.

No hace falta acudir a empresas extranjeras para comprobar la existencia de esta nueva realidad, sino que cada vez más empresas españolas se están sumando al carro del salario emocional, repitiendo el patrón que se da fuera de nuestras fronteras: gran aceptación social de estas empresas, una publicidad inmejorable para sus productos y servicios, además de ser casos de éxito empresarial.

Es hora de empezar a pensar en el salario emocional como una nueva política retributiva esencial para captar y retener el talento en las empresas.

Autora: Rosario Trasobares, Consultoría Jurídico- Laboral neobis